Un cobertizo de jardín, ya sea de madera, PVC o metal, es un espacio que puede ser utilizado de diferentes maneras: servirá como un refugio para las plantas durante la temporada de invierno, y también para guardar los muebles o las herramientas del jardín. Se puede además reservar un espacio para guardar una barbacoa, un accesorio ideal las reuniones familiares en el jardín durante la temporada de verano. Alcanza con disponer de buenos materiales y con seguir algunas reglas para poder construir y mantener un cobertizo.

Cuando se trata de la construcción de un cobertizo de jardín, cada paso es importante. Por lo tanto, es necesario aplicar adecuadamente las recomendaciones para evitar un eventual derrumbe.

Las formalidades administrativas

Una vez tomada la decisión, es importante no comenzar los trabajos sin haber obtenido previamente un permiso de construcción. De hecho, el papeleo se debe realizar antes, y dependerá de la superficie del cobertizo que desea construir. Asegúrese de averiguar en el ayuntamiento local a partir qué superficie hace falta una autorización (probablemente 20 metros). Si la superficie es inferior a ese límite, alcanzará con hacer una declaración de trabajos en el ayuntamiento de su residencia. Una vez completado esto, asegúrese de que el cobertizo esté ubicado sobre un suelo seco y plano. Esto evita inundaciones y permite la estabilización del cobertizo.

La elección de los materiales de construcción

Los materiales típicamente utilizados para construir un cobertizo son madera, PVC o metal. Las construcciones en PVC y metal son fáciles de instalar y requieren poco mantenimiento, además de ser resistentes a la humedad y las inclemencias del clima. Son baratas y se venden en los comercios especializados en jardinería, que proponen cobertizos de jardín listos para ser instalados. Sin embargo, es fácil constatar que un cobertizo en PVC o de metal galvanizado se adaptará menos el paisaje del jardín. Pese a esto, siempre será útil para el almacenamiento de las plantas en invierno, de las herramientas y del equipo de jardinería, de una bicicleta o de una cortadora de césped. Un cobertizo de madera, por su lado, se ajusta mejor al marco del jardín, tomando casi un aire de chalet. Varios tipos de madera se utilizan en la construcción de cobertizos. Si bien algunas personas aconsejan el uso de madera marina, otras, más numerosas, prefieren la madera de la familia de las coníferas (alerces, cedros, enebros, cipreses, etc.), ampliamente empleada en carpintería y para hacer estructuras. Los cobertizos construidos con madera de picea, densa y resistente a la humedad, pueden ser tratados, barnizados o pintados. La picea, el pino y el cedro son algunas de las especies utilizadas para los cobertizos de jardín. Talladas a menudo de manera escultórica en los jardines, estas maderas resinosas son adecuadas para la construcción de cobertizos de jardín.

Cómo construir un cobertizo de jardín

Antes de la fase de construcción en sí, haga una lista del equipo esencial: una escalerilla para montar el techo, cordel, un martillo, un destornillador, un taladro, una azada, una pala, una cinta métrica, una sierra, un nivel de burbuja, tornillos y un atornillador eléctrico. Para garantizar su seguridad, hágase ayudar por otra persona para levantar los paneles y los otros elementos que formarán el techo. Consiga un casco, guantes y gafas para protegerse de un posible accidente. También es importante saber que el cobertizo debe ser cuadrado o rectangular, y que si la superficie es superior a 20 m2 hay que optar por cimientos de hormigón. Para superficies menores, bloques de hormigón colocados en las esquinas alcanzan para darle estabilidad. Si usted no se considera un manitas puede requerir los servicios de un albañil. En lo que respecta a la estructura, mantenga unidos los bastidores por los cantos y fíjelos con tornillos. Asegúrese de que los bastidores estén derechos. El techo, por su lado, debe fijarse sobre las espigas con tornillos. Las espigas, colocadas a intervalos de 50 cm, garantizan la solidez del cobertizo. Con el nivel de burbuja, verifique que los bastidores estén derechos. Las puertas, por su lado, deben ser introducidas en las bisagras del marco.

Mantenimiento de un cobertizo de jardín

Es conveniente barnizar el exterior del cobertizo de madera. También es recomendable cepillarlo (antes del barniz) para darle una cierta estética. Para proteger la madera, pinte con pintura microporosa en capas regulares. El procedimiento es el mismo para la limpieza del techo y de los cimientos. Los cobertizos de metal deben ser protegidos contra la oxidación y la corrosión si no son de acero electro-galvanizado, para lo cual hay que recubrirlos con zinc. Estas soluciones seguras y prácticas garantizarán la estabilidad y la longevidad de su cobertizo.

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Publicado en Cobertizos de jardín por Alejo el 14 Jun 2011