Las hierbas aromáticas como el perejil o el cebollino son plantas de usos múltiples. En efecto, se las utiliza para generar aromas sutiles, producir aceites esenciales y realzar el sabor de los platos. El perejil y el cebollino son fáciles de cultivar, siempre y cuando se las mantenga correctamente, reciban un poco de luz sin demasiado calor y dispongan de una buena calidad de suelo.

El cultivo de plantas aromáticas, o específicamente de aquellas que forman la mezcla conocida como \”finas hierbas\”, como el perejil o el cebollino, permite unir lo útil a lo agradable en la actividad del jardinero. Se trata además de plantas positivas para nuestra salud, que aportan una buena dosis de vitaminas y minerales a nuestro organismo. El perejil pertenece a la familia de las apiáceas o umbelíferas, plantas que son muy útiles para los problemas digestivos (especialmente después de una comida abundante) y para refrescar el aliento. El perejil es muy apreciado, ya que incluso en pequeñas cantidades proporciona ciertas vitaminas y minerales. El cebollino, por su lado, pertenece a la familia de las alióideas como la cebolla o el ajo. Es una planta muy rica en vitamina C y provitamina A, de acción diurética y antioxidante y que favorece la circulación sanguínea. El perejil y el cebollino se cultivan sin dificultad, pero necesitan un suelo rico y bien drenado y crecen bien con sombra parcial.

El cultivo del perejil

El perejil es una planta aromática que se cultiva normalmente desde finales de febrero hasta marzo y se cosecha en el verano desde finales de junio También se puede considerar la siembra a finales de julio o en agosto para poder cosechar en primavera e invierno, pero si decide cultivar fuera de temporada debe asegurarse de que las plantas sean colocadas bajo campanas desde la aparición de las primeras heladas. Con respecto al suelo, el perejil necesita una tierra relativamente rica, fresca y profunda, preferiblemente bien mullida. También hay que asegurarse de que la planta esté colocada en un lugar con poca exposición al sol o a media sombra, ya que no soporta altas temperaturas. Antes de la temporada de siembra se puede dejar en agua las semillas de perejil durante una noche, y luego se las debe enjuagar antes de enterrarlas. Si planea cultivar varias plantas de perejil en tierra, debe realizar un hoyo de unos 5 mm de profundidad para cada planta, dejando una distancia de unos 10 cm entre cada pie, que cubrirá luego con tierra. También debe asegurarse de que las plantas sean regadas varias veces al día, sobre todo en verano, con una regadera con alcachofa para que la tierra se humedezca de manera uniforme.

Al igual que la mayoría de las plantas aromáticas, el perejil puede ser cultivado en interiores o en el borde de una ventana si no se dispone de mucho espacio. Para ello es preferible colocar las plantas en una maceta de profundidad suficiente y asegurarse de que no estén demasiado expuestas al sol. La cosecha se lleva a cabo normalmente tres meses después de la temporada de siembra, y en ese momento usted puede cortar algunos tallos cada vez que necesite. Para conservarlos se los puede secar o cortar en trozos pequeños y dejarlos por lo menos 2 horas a temperatura ambiente antes de congelarlos.

El cultivo de plantas de cebollino

El cultivo de cebollino comienza por la siembra entre febrero y marzo, y la cosecha se realiza de abril a noviembre. La mayoría de las plantas compradas en las tiendas debe ser trasplantadas en primavera, pero en principio se puede hacer casi todo el año excepto en invierno. El cebollino necesita un suelo rico, fresco, poco húmedo y bien drenado. Como el perejil, se debe cultivar a media sombra, evitando una gran exposición al sol. Para sembrar las semillas de cebollino es necesario realizar hoyos de 1 cm de profundidad y mantener una distancia de unos 10 o 12 cm entre cada futura planta. Luego hay que apisonar ligeramente, y proceder al riego con una regadera con alcachofa sólo cuando el suelo se vuelva muy seco. Es aconsejable podar las plantas a ras del suelo durante el período de floración en mayo. Las flores tienen un uso culinario, ya que se las puede agregar a las ensaladas o utilizarlas para hacer un aderezo, dejándolas macerar con sus tallos, durante un mes aproximadamente, en 1 litro de vinagre. Cada 3 o 4 años se debe desenterrar la planta, dividirla y replantar las dos mitades por separado. También es posible cultivar plantas de cebollino en interiores si no se tiene jardín; es aconsejable exponerlas a la luz, especialmente en invierno. Para conservar el cebollino hay que lavar los tallos, secarlos y cortarlos a lo largo antes de colocarlos en bolsas de congelación.

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Publicado en Crear un huerto por Alejo el 15 Jun 2011