Los bojes son arbustos de hoja perenne que se plantan en los jardines por sus cualidades decorativas. Se los puede podar para que destaquen, ya que los bojes se prestan a todos los caprichos: esfera, pirámide, siluetas de distintos animales o seto clásico. Así, pueden estructurar y dar volumen a un jardín. Los bojes son ineludibles en los grandes jardines de estilo francés.

En el lenguaje de las flores, el boj representa el estoicismo. Los galos, por su lado, lo asimilaban a la eternidad. En las regiones del norte, lo que se bendice el Domingo de Ramos son brotes de boj y no de olivo o palmera. En muchas zonas, se cuelga en la cabecera de la cama tanto como amuleto de la suerte que como símbolo religioso.

El boj: descripción y generalidades

El boj es un arbusto de 5 m de altura, de follaje siempre verde, denso y homogéneo. Existen unas setenta especies de boj, algunas de las cuales son nativas de Europa. El boj da una flor de color amarillo pálido en abril, pero es más conocido por su porte y su buena disposición al arte topiaria o escultura vegetal. Muy dura, la madera de boj se utiliza también en la carpintería y la escultura. De color amarillo limón, esta madera tiene fama de ser la segunda más dura del mundo después del ébano. Es importante tomar precauciones al manipular el boj, ya que es tóxico y su ingestión provoca vómitos y diarrea. Sus hojas machacadas de boj tienen un olor característico parecido al de la orina del gato.

Técnicas de cultivo del boj

El boj se propaga principalmente por esquejes. La operación debe llevarse a cabo preferentemente en verano, en el mes de agosto. Las estacas pueden ser plantadas directamente en la tierra, aunque se recomienda una primera plantación en maceta pequeña. El uso de hormona de enraizamiento no es necesario, pero es útil para lograr un alto índice de éxito con las estacas. Luego de la plantación en maceta hay que mantener las plántulas en la sombra, asegurando una humedad normal del sustrato. El trasplante en la tierra se debe realizar en otoño o primavera. Si no ha tenido tiempo para preparar los esquejes, puede utilizar las plántulas en macetas, disponibles en centros de jardinería. Muy adaptables, las plántulas de boj pueden incluso plantarse a raíz desnuda. También es importante saber que el boj se desarrolla idealmente en suelos ricos y calcáreos, por lo que se recomienda un suministro de calcáreo en suelos ácidos.

Mantenimiento del boj

La distancia de plantación entre dos bojes depende del uso al que se destine la planta. Para una bordura, se debe dejar un espacio de 10 a 20 centímetros entre las plantas. Para los setos, por su lado, es necesario un espacio de separación de 60 cm, mientras que para un macizo hay que aumentar esta distancia a 1,50 metros. El boj se beneficia del sol, pero también puede adaptarse a la sombra parcial. Como se trata de una planta que necesita mucha agua, es primordial realizar un acolchado o mulching, con el fin de mantener el suelo constantemente húmedo. El boj tiene un crecimiento regular pero más bien lento, de 5 a 7 cm por año para los ejemplares jóvenes y de unos 10 cm por año para los adultos. Se recomienda un suministro regular de fertilizantes en primavera para promover el crecimiento del boj y ayudarlo a adquirir un buen porte. Lo ideal es utilizar un fertilizante completo, como el abono para rosales. El boj también puede plantarse en maceta y ser llevado a la terraza o al exterior. Es una planta muy resistente, y aunque los brotes jóvenes a veces pueden achicharrarse después de una helada en primavera, esto no tiene ningún efecto sobre la planta, que renovará rápidamente su follaje dañado. En general, el boj en maceta puede permanecer fuera durante todo el año; el mejor lugar para ello es un rincón sombreado y al abrigo del viento. Sin embargo, si hace demasiado frío es aconsejable llevar la maceta al interior y colocarla en un lugar fresco y bien iluminado, ya que las plantas en maceta sufren más las heladas que las que están plantadas en la tierra. El trasplante debe realizarse en primavera u otoño.

La poda del boj

El boj está considerado como el arbusto ideal para el arte topiaria, ya que se poda dos veces al año, en mayo y septiembre. También puede soportar una poda severa de rejuvenecimiento en mayo. En ese caso se recomienda fertilizar y acolchar adecuadamente el suelo, para asegurar que la planta no se seque. Por otra parte, y como ya se mencionó más arriba, el boj puede podarse de todas las formas. Para formar un seto, es recomendable podar todas las plantas a la misma altura. Se les debe prestar toda la atención necesaria a las dos podas anuales para asegurar que el seto no ralee. Mientras que la creación de una bola o un cono toma unos 5 años, las formas más sofisticadas como la espiral o las siluetas propias del arte topiaria llevan unos 10 años. Se puede utilizar una estructura de alambre para crear una escultura vegetal que represente un animal. La estructura se instala por encima de la planta, a la que se dejará crecer; la poda puede comenzar cuando los ramos atraviesen el armazón de alambre. La operación consiste simplemente en podar todo lo que sobrepase, y puede realizarse dos o tres veces al año. Algunos grandes parques poseen esculturas vegetales más que centenarias; el boj, por su lado, puede vivir hasta 6 siglos.

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Publicado en Setos por Alejo el 10 Jun 2011