El cultivo y mantenimiento de flores son actividades de jardinería consideradas tanto un pasatiempo como una pasión. Lo principal es conseguir el material necesario: semillas para la siembra, fertilizantes y herramientas varias. Pero también hace falta conocer las características y el comportamiento de las plantas. El éxito en la plantación de florecillas reposa en un buen conocimiento de estas especies, así como sobre un mantenimiento regular y cuidados adecuados.

Para tener éxito en la plantación de florecillas de jardín hay que conocer las variedades existentes y el comportamiento de las plantas, que varía de una especie a otra. Las posibilidades para la elección de la flor a plantar son numerosas. Así, su futuro jardín puede incluir por ejemplo verbena, nomeolvides, violetas, resedas, especies de Alyssum, crisantemos, clemátides… La ventaja de estas florecillas es que, además de su finalidad decorativa, proporcionan un buen ambiente a la atmósfera de su jardín.

El crisantemo: pequeñas inflorescencias que alegran el jardín

Verdadera base de la decoración del jardín, el crisantemo de flor pequeña es fácil de cultivar. Se trata de una planta que se cultiva en un suelo de fácil labrado y que florece a finales de primavera. Como se beneficia del sol y no requiere de fertilizantes, es además muy fácil de cultivar. Su propagación se realiza por estaquillado o por división de mata.

La clemátide, un toque blanco, azul violáceo o púrpura para el jardín

Clasificada entre las enredaderas, la clemátide se mezcla fácilmente con otras plantas del jardín, como por ejemplo margaritas o altramuces. Cabe señalar que es una planta cuya parte superior se beneficia del sol pero cuya parte inferior necesita de sombra. Para su mantenimiento, prevea una poda primaveral que consistirá en eliminar las ramas viejas y estimulando las que ya hayan florecido antes.

El nomeolvides para un jardín con azul o rosa

Planta resistente al frío, el nomeolvides crece bien en zonas húmedas (zonas templadas cerca de arroyos o ríos). Si decide plantarlo en su jardín, tenga en cuenta que se desarrolla bien en suelos ricos, a los que se puede agregar un poco de arcilla para mejorar los resultados. Cuando instale las plántulas obtenidas por germinación de semillas en tierra, no ponga más de 5 plantas por metro cuadrado de terreno para no dañar la armonía del conjunto. También tenga en mente que el nomeolvides teme el calor y la exposición prolongada a la luz solar, por lo que habrá que orientarlo teniendo en cuenta estas características. De florecimiento bastante rápido después de la fase de crecimiento, la planta tarda alrededor de dos años en crecer.

La violeta, una flor de jardín de flores ornamental y aromática

La violeta es la planta de jardín por excelencia. Si usted quiere iniciarse en el cultivo de violetas, sepa que debe plantarlas en un suelo ni demasiado ácido ni demasiado básico, sino con un pH neutro. Este suelo debe permitir que el agua circule en abundancia. La siembra de la violeta tiene lugar entre abril y mayo; las flores aparecen en primavera y otoño, según la temperatura y la exposición al sol del jardín. Sin necesitar mayor mantenimiento aparte de un riego frecuente y un desmalezado regular, la violeta se reproduce en un ciclo de aproximadamente 18 meses.

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Publicado en Plantas cubresuelo por Alejo el 29 Jul 2011