Cada vez más popular entre los paisajistas y jardineros, el parterre de flores da carácter y un toque de estética a su jardín. La creación de un parterre de flores es comparable a un verdadero arte, porque el hecho de asociar y combinar diferentes variedades de flores con cierta coherencia y dentro de una temática determinada requiere una habilidad real. Para tener un parterre siempre espléndido, es necesario garantizar su mantenimiento, incluyendo el sistema de riego.

Usted podrá elegir entre sistemas de riego de superficie o enterrados, o incluso combinar estos dos sistemas para proporcionar un mejor riego para cada una de las flores del parterre.

Los sistemas de riego de superficie

En la superficie, usted puede instalar aspersores, que tienen la ventaja de cubrir áreas más o menos grandes y ser bastante discretos. El riego así realizado se parece a una lluvia fina y abundante que no corre el riesgo de dañar las flores, ni siquiera las más frágiles. En cambio, no es recomendable utilizar este sistema si su parterre incluye variedades de flores susceptibles de desarrollar hongos cuando su follaje se expone al agua con demasiada frecuencia. Para los parterres pequeños, los aspersores fijos servirán perfectamente. Para un parterre más extenso, existen aspersores rotativos; para parterres que presenten ángulos o a ras de la pared, por su lado, prefiera aspersores oscilantes, que riegan de manera rectangular en lugar de circular. Por último, si el precio no es un problema, usted podrá optar por aspersores móviles: se trata de trenes de riego que siguen un circuito de tuberías como un vagón sobre rieles.

El riego por goteo también puede ser considerado, y se trata incluso de uno de los sistemas más eficientes: a pesar del flujo muy bajo de agua utilizado, el riego está perfectamente localizado y ofrece un suministro óptimo de agua para cada una de las plantas y flores del parterre. Su única desventaja son los tubos o mangueras, poco discretos. Por último, hay tubos porosos que permiten el paso del agua en algunas de sus partes: muy fáciles de instalar, basta con colocar las mangueras en la base de sus flores; la difusión de agua suele ser irregular.

Los sistemas de riego enterrados

Los sistemas de riego subterráneos son mucho más discretos que los sistemas de superficie. Gracias a la red de tuberías subterráneas y al uso de turbinas o boquillas retráctiles que desaparecen en el césped una vez realizado el riego, la estética del parterre de flores será todavía mejor. Sin embargo, un sistema de riego subterráneo requiere prever numerosos trabajos. Para un parterre de dimensiones reducidas, usted podrá utilizar boquillas para el riego, que tienen un alcance de 4m 50. Para superficies más grandes, las mini-turbinas permiten regar hasta 7 metros, mientras que los chorros de las turbinas llegan hasta los 10 metros.

Para aumentar la eficiencia del riego, usted puede equiparse de un programador, que coordinará el riego de forma independiente. Esto es muy útil si usted debe ausentarse y teme por la supervivencia de sus flores. Mientras que los programadores más simples permiten automatizar el inicio, la duración y el fin del riego (la duración es más o menos ajustable dependiendo del modelo), los modelos de programadores más sofisticados permiten programar el riego de las diferentes boquillas y turbinas de forma independiente según las necesidades de las plantas.

Consejos para regar sus flores en el parterre

Sean cuales sean las variedades de plantas que tenga en su parterre de flores, el riego debe hacerse temprano en la mañana o al anochecer, pero nunca cuando el sol está alto en el cielo como al mediodía. En efecto, los rayos del sol pueden atravesar las gotas de agua y quemar las flores, actuando como una lupa. Por ello, lo mejor es esperar hasta que el suelo del parterre se haya enfriado para que el agua pueda infiltrarse adecuadamente en la tierra en lugar de evaporarse. Para mantener un poco de humedad, también se puede instalar un mulching alrededor de las plantas con corteza de pino, periódicos viejos e incluso cartón.

También hay que considerar la calidad del suelo del parterre; si es más bien ligero y arenoso, es mejor regar poco y a menudo que mucho de una vez, para que el agua no se estanque. Por el contrario, cuando el suelo del parterre es compacto y arcilloso, el riego tiene que ser más abundante pero menos frecuente. Por último, preste atención a la calidad del agua que utiliza para el riego; opte en la medida de lo posible por el agua de lluvia o de pozo, y evite a toda costa regar las flores con agua dura.

Entradas relacionadas:

  1. Algunos consejos a seguir para instalar un sistema de riego subterráneo
  2. Cómo instalar un sistema de recuperación de aguas pluviales
  3. Riego automático: los diferentes sistemas a utilizar según el estado del suelo
  4. Guía del riego
  5. Algunos consejos prácticos para un buen riego del huerto

Publicado en Guía del riego por Alejo el 22 Jun 2011