La trituración y el compostaje de vegetales son operaciones muy importantes para mejorar la salud de las plantas y acelerar su crecimiento. Se trata de reducir en pequeños trozos las hojas muertas, la hierba y las ramas para transformarlas en compost, que se utilizará para enmendar el suelo y renovar el humus. Es un procedimiento bastante simple, pero requiere ciertos métodos para ser realmente eficaz.

Por lo general, el primer reflejo después de limpiar su jardín es deshacerse de los residuos recogidos. Esto sería una lástima, ya que estos desechos pueden ser muy útiles si se los sabe aprovechar correctamente. En efecto, si se los trata y utiliza de manera adecuada, se mejorará la estructura del suelo, favoreciendo así el buen crecimiento de las plantas. Para ello, debemos por supuesto utilizar el equipo apropiado y ser metódico para lograr el resultado deseado.

La trituración de desechos vegetales

La trituración de desechos vegetales consiste en la reducción de su volumen cortándolos en trozos pequeños con una trituradora, que debe ser elegida teniendo en cuenta el tamaño del jardín y el volumen de materia a tratar. Este tipo de dispositivos existe tanto en modelos eléctricos como de motor térmico, pero en ambos casos es indispensable tomar precauciones al utilizarlos para evitar algunos accidentes. Así, el uso de gafas protectoras y guantes es recomendado durante la trituración. Una vez triturados los residuos vegetales, se los pueden añadir al compost o esparcirlos sobre las platabandas para mantener la humedad del suelo y frenar la proliferación de malas hierbas, que una vez privadas de luz no podrán desarrollarse de forma adecuada. Sin embargo, es importante subrayar que sólo se deben triturar las plantas bien secas, ya que cuando todavía están verdes pueden dañar la máquina al transformarse en pulpa.

El compostaje de desechos vegetales

El compost es muy importante, ya que fertiliza el suelo y mejora su capacidad productiva. Para fabricarlo se puede elegir entre utilizar una bandeja especial colocada en la sombra o dejar fermentar la materia directamente en el suelo los residuos vegetales triturados, a los que puede agregarse residuos de alimentos biodegradables Si se utiliza una bandeja no hay que olvidar disponer el contenido de manera de que haya una buena circulación de aire en el interior. Así, se pueden depositar los diversos residuos teniendo cuidado de alternarlos según su naturaleza y regando cada capa a medida que se la coloca. Para acelerar la fermentación, es posible mezclar el agua de riego con un componente químico que se vende en los comercios. Para mantener el compost hay que regarlo y mezclarlo con regularidad con una horquilla. Esto permite airearlo y comprobar el progreso del proceso, al mismo tiempo que se lo mantiene húmedo. A partir de 4 meses, el compost tiene un color marrón y una textura friable. Después de 6 meses ya se lo puede utilizar tal cual o mezclado con otras sustancias como tierra o arena.

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Publicado en Mantenimento de jardines por Alejo el 14 Jun 2011