Existen muchas variedades de girasoles, que se diferencian principalmente por el tamaño o el color. Algunas dan flores simples y otras dobles. Así, la elección del girasol a cultivar depende del jardín. Alcanza con respetar las principales etapas de cultivo para obtener bonitas plantas y lograr un jardín bellamente decorado por la brillantez de sus colores. Por otra parte, una vez instalado, el girasol requiere pocos cuidados.

Hay dos formas principales para el cultivo de girasoles. Todo depende de la época en que  se lleve a cabo la plantación. En general, si se hace antes de la estación cálida, el cultivo de girasoles se realizará en maceta. En cambio, si se espera el verano se puede proceder a la siembra directa en tierra. En todos los casos, las etapas de cultivo deben ser escrupulosamente respetadas.

El cultivo de girasoles en invierno o en otoño

Es posible cultivar girasol aunque todavía haga bastante frío, pero en ese caso se deberá optar por el cultivo en interiores para proteger a la planta. Lo ideal para ello es utilizar una maceta con turba y arena en partes iguales; en esa mezcla serán sembradas las semillas de girasol. A continuación, sólo habrá que humedecer un poco la tierra y asegurarse de que la maceta haya sido colocada en un espacio iluminado. Las semillas también deberían recibir un poco de calor. En general, el alféizar de la ventana es un emplazamiento perfecto. Si la planta crece y cuenta con verdaderas hojas antes de la helada, lo mejor es trasplantarla a un recipiente más profundo. El trasplante en tierra sólo debe realizarse cuando el frío comience a irse.

La siembra directa del girasol durante la estación cálida

Los girasoles se pueden cultivar a partir de la siembra directa cuando el frío y las heladas comiencen a dejarle lugar al sol. Para ello, lo primero que debe hacerse es agregar compost a la tierra para enriquecerla. Esta preparación se puede hacer con anticipación para que, en el momento de la siembra, el suelo ya esté flojo y sea lo suficientemente rico como para alimentar la planta. A continuación hay que sembrar las semillas de girasol y cubrirlas con tierra. Luego hay que apisonar suavemente antes de regar. Para proteger los primeros brotes de girasol de caracoles y babosas, es apropiado utilizar semillas orgánicas antibabosas.

Las condiciones de cultivo del girasol

Es importante saber que el girasol es una planta de verano, y como tal le gusta el calor y crece bien en lugares soleados. Por esta razón es mejor cultivarla en el lugar más iluminado del jardín. Por otra parte, el girasol es una planta exigente en nutrientes, por lo que necesita un suelo rico que favorezca su crecimiento. Es importante realizar un suministro de fertilizantes si se quiere obtener una bella floración. Asimismo, hay que respetar una distancia de 30 cm entre cada planta para garantizar el desarrollo adecuado. Por último, el girasol sólo necesita ser regado en el momento de la plantación o en caso de sequía, ya que el exceso de humedad puede pudrir las raíces. Todas las variedades de girasol se cultivan de la misma forma. Por último, es importante tener en cuenta que las variedades gigantes de más de 1,50 m deberán ser rodrigonadas para que la planta no se dañe.

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Publicado en Flores de verano por Alejo el 04 Jul 2011