Público o privado, el jardín es bonito ver cuando está bien verde. El césped es una de esas plantas que cubren el suelo y le dan buen aspecto. Su cultivo requiere una preparación especial del terreno antes de la plantación de acuerdo a ciertas reglas de la jardinería que conviene seguir para obtener un tapiz de hierba impecable. La conservación del césped requiere un mantenimiento regular.

Son muchas las variedades de césped que pueden sembrarse, y suelen presentarse en los comercios agrupadas en diversas mezclas de gramíneas. Así, podemos mencionar por ejemplo el césped florido, que se utiliza para tapizar las vías de los tranvías; el césped sintético, que por supuesto no se trata de una planta pero se utiliza para terrenos deportivos; el césped inglés, destinado al uso ornamental debido a su baja tolerancia al pisoteo y la sequía, y por último el césped más rústico y resistente, ideal para practicar deportes. Existen dos técnicas para la plantación del césped: la tradicional, que utiliza el método de la siembra, y la moderna, que consiste en colocar tepes (pedazos de tierra cubiertos de césped y muy trabados con las raíces). Pero incluso antes de plantar el césped, se debe preparar adecuadamente el suelo.

Preparación del suelo para la plantación de césped

Hay que considerar varios aspectos antes de la plantación del césped: la exposición al sol del terreno, el nivel de humedad y de calor, la naturaleza del suelo (arenosa o pesada), el Ph de la tierra, las posibilidades de riego y fertilización y las necesidades de escarda y de siega. El terreno de cultivo se debe revolver a una profundidad de más de 20 cm, asegurándose de romper los terrones (por ejemplo con un rastrillo de mano) y de retirar las piedras eventualmente presentes en el terreno. La tierra debe ser nivelada antes de apisonarla para que adquiera la firmeza necesaria para la siembra del césped. Si el suelo no es rico, es preferible colocar primero una capa de musgo, lo cual es muy beneficioso para el césped.

La plantación de césped

La plantación tradicional del césped consiste en sembrar las semillas en un terreno preparado previamente. Los granos deben extenderse sobre toda la superficie del espacio a recubrir. Un esparcidor a veces es útil para esta tarea, pero también puede procederse maualmente. Pasar repetidamente un rodillo permitirá compactar el suelo antes de proceder al riego con gotas finas. Si se opta por el cultivo de césped a partir de la siembra hay que estar atentos a la presencia de pájaros y hormigas, que destruyen algunas de las semillas y producen huecos que luego habrá que cubrir. Muy moderno, el método de colocar fajas de tepes permite colocar matas de césped sobre un terreno tratado y que tenga una textura esponjosa. Ya preparadas por profesionales, las fajas de tepes deben colocarse una al lado de la otra y en perfecto orden. Los bordes de las matas deben estar bien adheridos al suelo y en contacto con la faja siguiente para evitar que el conjunto se desagregue. También se debe colocar turba en los extremos de las fajas, tanto para mantener la humedad del suelo como para evitar que se sequen los bordes de las capas de hierba. La turba permite que el césped encuentre fácilmente los nutrientes que necesita. El riego regular pero en pequeñas dosis es esencial en este punto.

Mantenimiento del césped

Una vez que la plantación se ha completado y el suelo está bien cubierto, queda una etapa muy delicada del cultivo: el mantenimiento. De importancia capital, el riego debe ser regular para mantener el suelo siempre húmedo. Para nutrir bien el césped, se debe mantener la fertilidad del suelo mediante el suministro de fertilizante, que debe realizarse en primavera y en otoño. El uso de ray-grass inglés es necesario para cubrir las partes sin plantas. Hay que aprovechar esta operación para colocar una delgada capa de tierra (2 cm) sobre la hierba. Cuando el césped envejece hay que renovar ciertas partes eliminando directamente las plantas debilitadas. Se debe proceder entonces a repoblar el césped mediante el uso de semillas previstas a a tal efecto. Un suministro de mantillo es necesario en ese momento. Para asegurar la buena supervivencia del césped es conveniente airear el suelo con un dispositivo llamado \”aireador\”. También se debe utilizar con frecuencia un herbicida para eliminar malas hierbas del césped. La poda del césped se debe hacer cada mes.

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Publicado en Guía del césped por Alejo el 05 Aug 2011