Las plantas suculentas abarcan unas setenta familias de plantas, la mayor parte de las cuales viven en zonas desérticas. Estas plantas se caracterizan por su adaptación a la sequía. En efecto, sus raíces, tallos, troncos u hojas se han engrosado para almacenar agua. Estas diferentes partes de la planta se han vuelto así más carnosas, dándole a la planta un aspecto exótico. Debido a estas retenciones de agua, las suculentas también son conocidas como \”crasas\”.

Las plantas suculentas o crasas han desarrollado formas de adaptación con el fin de almacenar agua y sobrevivir en condiciones de extrema aridez. Estas adaptaciones se manifiestan a menudo bajo la forma de hojas gruesas y llenas de savia. De ahí el término \”suculenta\”, del latín suculentus, es decir \”lleno de jugo\”. Así, las plantas crasas almacenan el agua para sobrevivir durante los períodos de sequía.

Los cambios fisiológicos de las suculentas para adaptarse al clima seco

El primer cambio de forma que puede encontrarse en las suculentas es el tronco hinchado en forma de botella. Esta hinchazón es notable en las grandes especies como el baobab, que es un ejemplo típico de árboles botella. El baobab se diferencia de otros grandes árboles de tamaño similar por su corteza lisa y su madera fibrosa. Así, su tronco consiste en una superposición de capas esponjosa destinadas a retener agua. Las muchas especies suculentas del género Euphorbia, por su lado, presentan de manera similar tallos carnosos.

El segundo cambio visible es el engrosamiento de las hojas, característico en las diversas especies de agaves y áloes. Estas hojas gruesas están protegidas por una capa cerosa que impide la evaporación. Este tipo de adaptación se manifiesta en familias muy diversas, sin conexión aparente entre ellas. La desaparición de las hojas y su sustitución por espinas puede observarse en las cactáceas (cactus). El tronco y las ramas almacenan agua, mientras que la ausencia de la hoja reduce la evaporación. El último cambio de forma concierne a las raíces. Este último tipo de transformación es sin embargo mucho menos visible.

Dónde viven las suculentas

La adaptación de las plantas xerófitas es una respuesta a una falta crónica de agua. Se trata por lo tanto de una estrategia para sobrevivir en un medio seco. Sin embargo, no todas las suculentas viven en un lugar árido o en el desierto. Efectivamente, algunas especies viven a gran altura y otras crecen en las altas latitudes cercanas al círculo polar, lo que las hace tolerantes al frío. Esto prueba que la adaptación no está necesariamente limitada al calor.

Sin embargo, una gran mayoría de las plantas suculentas vive en las zonas cálidas y áridas del planeta. Aunque este tipo de plantas son las más representativas del grupo, también se pueden encontrar plantas suculentas en la selva. El género de cactus Rhipsalis o la familia de las orquídeas son ejemplos típicos de esta categoría.

Las condiciones de supervivencia en el hábitat natural de estas plantas ocultan adaptaciones que no son evidentes. En las zonas costeras o cerca de un río, las plantas absorben la humedad del aire. Por lo tanto, estas especies están más activas durante la noche, cuando la temperatura baja y la humedad del aire se condensa. Así, las plantas pueden sobrevivir incluso si hay muy poca lluvia.

Esta vida nocturna se ve reforzada por el cierre de los estomas durante el día para evitar la evaporación. La planta asimila así el dióxido de carbono sólo por la noche. En el caso de las plantas que pierden las hojas, las ramas toman a menudo un color verdoso debido a la clorofila, que permite la fotosíntesis directamente por el tronco y las ramas. Algunas especies de plantas que viven en un ambiente estéril también se han adaptado para tomar los nutrientes del aire.

Cómo mantener las suculentas

Desde finales de los años 80, existe un interés cada vez mayor de los aficionados por las plantas suculentas. La literatura sobre el tema no deja de aumentar, y cada vez hay más especies disponibles en el mercado. La propagación de las plantas suculentas es relativamente fácil, ya sea por semillas (en el caso de agaves y aloes, por ejemplo) o por vía vegetativa (kalanchoes y cactus).

Desafortunadamente, muy pocas de estas especies resisten el frío continental europeo, por lo que hay cultivarlas entonces en invernaderos o apartamentos. Las suculentas viven en un ambiente muy especial. Es muy difícil reproducir en las plantaciones las condiciones naturales en las que crecen estas plantas.

Sin embargo, su capacidad de adaptación hace que sean muy tolerantes. Así, la mayoría de las suculentas disponibles en los centros de jardinería se han adaptado entonces al calor ya la sequía. Sin embargo, estas plantas pueden marchitarse por falta de luz. Por ello, el uso de lámparas especiales puede ser recomendable en el invierno. El exceso de agua, tanto por riego como por la humedad ambiente, les es extremadamente dañino. Las suculentas también son sensibles a su medio de cultivo: la mayoría crece mejor en un terreno rocoso.

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Publicado en Suculentas por Alejo el 17 Aug 2011