Originaria de México, la dalia es una planta tuberosa que fue llamado así en honor a un famoso botánico llamado Dahl. Con su larga floración, esta magnífica planta florífera se cultiva para realzar macizos y adornar terrazas desde principios del verano hasta fines del otoño. Muy poco exigente, la dalia sólo necesita algunos cuidados para crecer bien.

La dalia es una planta perenne de la familia Asteraceae descubierta en México en el siglo 18. Consumida por las poblaciones autóctonas por sus raíces, la dalia planta pronto se hizo popular por sus hermosas flores ornamentales. Hoy en día, esta planta florífera se cultiva tanto para iluminar alegrar jardines y terrazas como para embellecer con sus suntuosas inflorescencias de color naranja, rosa, rojo o blanco.

Una dalia para cada parte de la casa

Es útil saber que las dalias vienen en una multitud de especies que difieren en su color, tamaño y porte. Entre ellas, las variedades más comunes son la dalia cactus, la dalia pompón, la dalia ornamental y la dalia simple. Si usted quiere cultivar dalias en un balcón o una terraza, prefiera especies enanas que se adapten perfectamente a las macetas y jardineras. En cambio, elija sin dudar especies de porte esbelto y alargado si desea aportar un toque luminoso y brillante a sus macizos, platabandas o parterres. Ya sea que estén destinadas a jardines o a balcones, las dalias son plantas bulbosas que deberán plantarse en tierra en la primavera para obtener una floración generosa que se extenderá desde principios del verano hasta la aparición de las primeras heladas.

Cómo plantar las dalias

Antes de plantar sus dalias, es esencial elegir un lugar que disfrute de una buena exposición a la luz y no reciba demasiado viento. Con respecto al tipo de suelo, será conveniente elegir una tierra rica, con buena aireación y más bien ligera, a sabiendas de que las dalias no se desarrollan bien en tierras demasiado pesadas. En general, hay que esperar hasta abril o mayo para poder proceder a la plantación de las dalias. Sin embargo, es posible plantar desde el mes de marzo para obtener una floración mucho más temprana. El procedimiento de plantación consiste en plantar los tubérculos en un sustrato compuesto de mantillo húmedo y colocarlos luego en un ambiente cálido y bien iluminado. Hasta que finalmente los brotes jóvenes hagan su aparición, se recomienda no regar el sustrato y privilegiar el uso de un vaporizador para humedecer bien los tubérculos. Cuando llegue el momento de plantar las dalias, cave agujeros lo suficientemente profundos como para cubrir los tubérculos, y apisone bien la tierra alrededor al final de la operación. Si usted quiere hacer crecer sus dalias en jardineras, deberá seguir los mismos pasos que para la plantación de variedades enanas.

Cómo dividir y estaquillar dalias

Para dividir las dalias, alcanza con cortar el tubérculo en dos partes iguales a la llegada de la primavera, asegurándose de que cada una de las mitades obtenidas tenga al menos un tallo. Para proceder al estaquillado hay que extraer un brote lo suficientemente resistente y plantarlo en una maceta de profundidad media, que se colocará en un lugar seco y cálido. Por último, tenga en cuenta que las dalias también pueden crecer a partir de la germinación de semillas, recogidas previamente en una flor y luego sembradas en un suelo ligero y húmedo. Después de la germinación, ya no quedará más que esperar a la primavera para poder proceder finalmente a la plantación de las dalias jóvenes en tierra, en un lugar bien iluminado y protegido del viento.

Cómo mantener las dalias

Para cuidar adecuadamente las plantas, asegúrese de que el suelo esté ligeramente húmedo, ya que las dalias se desarrollan especialmente bien en tierras frescas. Por lo tanto, asegúrese de que el riego sea frecuente para que la tierra se mantenga bien húmeda. Durante la floración, elimine regularmente las hojas muertas, los tallos dañados y las flores marchitas para asegurar que la planta no se agote y que las inflorescencias puedan ser renovadas. Cuando aparezcan las primeras heladas y las hojas pierdan su bello color verde, elimine los tallos restantes, arranque los tubérculos y conserve las matas en un lugar seco, lejos del frío y la humedad. Con la llegada de la primavera, usted podrá devolver a sus macizos y balcones todo su brillo y sus bellos colores volviendo a colocar los rizomas en la tierra. En cuanto a las enfermedades, usted deberá proteger sus plantas de caracoles y ácaros. En caso de ataque, privilegie las soluciones ecológicas como el mulching o las cenizas de madera, que no contaminan el medio ambiente y evitan el uso de tratamientos químicos demasiado agresivos para la planta.

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Publicado en Bulbos de primavera por Alejo el 23 Jun 2011