Segar el césped puede parecer una operación trivial. Sin embargo, algunos parámetros deben ser tenidos en cuenta. Así, es útil saber cuáles son las diferentes épocas propicias para la poda, qué altura es indicada para cada estación y cómo elegir el equipo adecuado. Teniendo en cuenta que es posible optar entre una podadora eléctrica y una térmica, que recoja la hierba cortada o no, es importante elegir correctamente entre los materiales existentes en las tiendas especializadas.

Un hermoso césped jardín no se obtiene tan fácilmente como algunos podrían imaginar. Por el contrario, es común tener que enfrentarse a una hierba marchita, contaminada o cuyo aspecto simplemente no cumple las expectativas. Por lo tanto, estar satisfecho con su territorio, es importante seguir algunos consejos básicos.

 Cuándo cortar el césped 

En primer lugar, una frecuencia alta dará una buena densidad al césped y tendrá como efecto espesar las briznas de hierba. De esta forma, este espesor evitará el desarrollo de las malas hierbas. Una regla de oro es llevar a cabo la poda siempre en tiempo seco. Con la llegada de la primavera, el período de crecimiento, se puede segar el césped todas las semanas, pero esto dependerá del tipo de hierba. El ray grass inglés, por ejemplo, es de crecimiento rápido, y requiere una poda semanal. Por otra parte, es también en primavera cuando hay que podar más corto. En verano se puede podar con menos frecuencia, pero en cambio hay que cortar menos para proteger la base de las plantas contra los rayos del sol. En el otoño, las últimas podas se deben hacerse a una altura aún mayor para que el césped pueda almacenar un máximo de energía en previsión del invierno. 

Cómo proceder 

En general, no se debe cortar más de un tercio de la longitud de las briznas. De hecho, mantener las briznas a una cierta altura permite mejorar el enraizamiento de éstas. Cortar más corto implica también cortar con mayor frecuencia. En concreto, para proceder hay que pasar la cortadora con un trayecto que trace una cuadrícula. La operación consiste en superponer cada línea de pasaje de la podadora de manera de no dejar superficie alguna sin cubrir. La hierba que se encuentra en una zona de sombra debe ser cortada más alta porque es más frágil y crece más lentamente. Si el terreno tiene bordes o rincones de difícil acceso de alcanzar con la cortadora de césped, se recomienda utilizar primero un cortaorillas. Por otro lado, siempre es necesario verificar la ausencia de obstáculos u objetos en la superficie a podar para evitar que salgan despedidos inopinadamente. La hierba cortada será recogida gracias a una especie de césped con la que está equipada la cortadora o retirada luego usando un rastrillo, pero en ningún caso se la puede dejar sobre el terreno. De hecho, los recortes de hierba podría asfixiar el césped o favorecer el desarrollo de enfermedades. Finalmente, es importante elegir el material adecuado.

 Elección de las cortadora de césped 

Para un terreno de menos de 500m ² se recomienda el uso de una podadora eléctrica. Más allá de estas dimensiones, es más adecuado utilizar un cortacésped térmico, o incluso un tractor cortacésped para las superficies muy grandes. La elección también dependerá de los resultados esperados y de la frecuencia de poda. Por ejemplo, una podadora equipada con cuchillas helicoidales es la elección ideal para una poda de calidad; las hojas deben aflilarse por lo menos una vez al año. Por último, el uso de gafas protectoras es muy recomendable para protegerse de eventuales guijarros disparados accidentalmente por el aparato.

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Publicado en Guía del césped por Alejo el 05 Aug 2011