Originario de Australia, el eucalipto es un árbol de la familia de las Mirtáceas. Si bien se trata de un árbol que se desarrolla idealmente en climas cálidos, las especies más resistentes pueden adaptarse a las regiones frías. Además de sus propiedades medicinales y de su aroma, el eucalipto tiene la particularidad crecer tanto en interiores, como planta de apartamento, que al exterior. Así, las especies más resistentes pueden adaptarse perfectamente a los jardines, mientras que las especies más frágiles serán magníficas plantas de interior.

El eucalipto es un árbol de hoja perenne que cuenta con más de 700 especies. Así, mientras que algunas no miden más que 3 metros, otras pueden fácilmente superar los 100 metros. Muy apreciadas por los koalas, las hojas de eucalipto son tradicionalmente recomendadas para el tratamiento de las enfermedades respiratorias. Además, estas hojas también pueden purificar el aire de jardines y hogares gracias a sus muchas propiedades: alcanza con aplastar una entre los dedos para que el aire se impregne del aroma que emana de ella. A pesar de que provenga de regiones cálidas, el eucalipto tiene la particularidad de poder adaptarse a muchos climas, y por ello puede encontrárselo tanto en los trópicos que en los países más fríos. Para obtener los mejores resultados, elija la especie que mejor se adapte a su entorno. Si dispone de u gran espacio, opte por especies tales como el eucalipto sidra (Eucalyptus gunnii), el Eucalyptus nitens o el Eucalyptus globulus. Sin embargo, dado que estas variedades de árboles pueden sobrepasar los 20 metros de altura, el mantenimiento se hace mucho más difícil. Por otra parte, no se trata de especies particularmente resistentes al frío, y esta característica las hace más susceptibles a las heladas. Si usted vive en una región donde los inviernos son duros, opte más bien por especies como el Eucalyptus pauciflora, el Eucalyptus neglecta o el Eucalyptus niphophila. Mucho más resistentes que la mayoría de las variedades, estos tipos de eucalipto no sufren ni con las heladas ni con las bajas temperaturas. Por último, si usted vive en un apartamento, opte más bien por el  eucalipto sidra, de crecimiento mucho más lento.

Cómo plantar eucaliptos

Para crecer bien, los eucaliptos necesitan estar expuestos a la luz solar. Como por otra parte no soportan bien los vientos fuertes y las corrientes de aire helado, deben ser colocados en un lugar que esté bien protegido. En cuanto al tipo de suelo, hay que asegurarse de que sea neutro o ligeramente ácido, pero debe tratarse en cualquier caso de una tierra rica y bien drenada. Por último, ya que las terrenos demasiado húmedos o demasiado secos tampoco son convenientes, es mejor optar por un suelo más bien frío.

Los eucaliptos deben plantarse en general en primavera. Para ello hay que elegir plántulas sanas y plantarlas a una profundidad aproximada de 5 centímetros. Si la tierra de la que dispone no  es lo suficientemente rica, es posible nutrir la planta con abono orgánico ,que se mezclará a la tierra. Para que la planta joven disponga de un apoyo firme, será posible atarla a un rodrigón hasta que sea lo suficientemente fuerte como para crecer adecuadamente. Si usted optó por un eucalipto de interior, hay que sembrar desde el comienzo del verano las pequeñas semillas en un suelo rico y fértil. Para cultivar mejor la planta, elija siempre macetas profundas de fondos perforados y expóngalas directamente a la luz solar directa.

Cómo mantener su eucalipto

Como los eucaliptos necesitan bastante agua, se los puede regar regularmente sin correr el riesgo de que las raíces se pudran. Sin embargo, hay que esperar a que la tierra sea menos húmeda para realizar un nuevo riego. Cuando llega el invierno, hay que disminuir la frecuencia de riego y asegurarse de que la tierra esté completamente seca antes de regar. Por otra parte, si usted cultiva el eucalipto en interiores debe asegurarse de que a la tierra no le falte nunca agua. Esta precaución es especialmente importante porque la planta estará directamente expuesta al sol. En invierno, alcanza con llevar la maceta al interior y colocarla en un lugar donde reciba siempre un poco de luz. Cuando el clima se suavice, no olvide aclimatar la planta progresivamente a la temperatura ambiente para que no sufra cambios bruscos de temperatura. Los eucaliptos de interior deben podarse siempre en primavera para que no crezcan demasiado, aunque lamentablemente esta operación necesaria les impedirá florecer. A partir del mes de abril, usted podrá replantar el eucalipto luego de haber agregado un poco de abono orgánico a la tierra.

En lo concerniente a los eucaliptos de jardín, no hay que preocuparse porque las especies resistentes no sufren particularmente en invierno. De todas maneras, siempre es posible podar el árbol en primavera y proporcionarle abono orgánico para darle más fuerza. También es importante saber que se pueden propagar los eucaliptos al final del invierno mediante la siembra de semillas provenientes del árbol. Para ello, alcanza con esperar a que germinen las semillas recolectadas; cuando estén listas, usted no tendrá más que colocarlas en un suelo rico, teniendo cuidado de protegerlas de las inclemencias del tiempo. Cuando llegue el verano sólo quedará plantar los eucaliptos jóvenes en tierra

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Publicado en Arboles y arbustos por Alejo el 14 Jun 2011